Suelta en el frescor
de su color caramelo
a punto de lo amoroso
y entretejida
a lo que urge
desde la mocedad
por búsquedas
que salieron
a los caminos,
deletrea permanencia
entre aves y verdores
con palabras
que izan una laguna
como al fuego
que encuentra razones
en lo propicio del agua.
Micaela
en lo mago de un secano
vuelve trigales
lo clave
para nutrir
la cadencia del mañana.