Se espeja en la noche
como despedida a lo que fue
del día y de otras épocas
siendo una trenza
de olvidos sanadores
en el hogar de las ruinas
entre las que se portan
retornos al misterio
que desentraña
historias de este lar
donde las montañas
lijan monotonías.
La bailarina autora
de vuelo en suspenso
nos recuerda
la liviandad que germina
cuando una se atreve
a ir dando vuelta páginas
de sucesos que arrancan
cotidianeidades
y vuelve a lo creativo
de vivir tranquilamente
con el aire que respiramos.