Gracias por la fotografía Liliana D’Ambola Parque Energético de Miramar, diciembre 2017
Con el sombrero
elegido para volar
y el abrazarme
al tronco
del bien vivir
que me regresa
al mar del inicio
sané aquel duelo
y el equilibrio
del bosque escaló
desde los palitos
vueltos columnas
de lo energético
hasta la circunferencia
donde equidista
lo vital.