Con la fortuna de las leyendas
y la lucidez que inspira
a lo épico
esta embarcación manifiesta
las aspiraciones de la rebeldía
como de lo fantástico
mientras atrae para atravesar
la carnadura de la historia.
Semana a semana
zarpa desde el empeño
de razonar con relatos identitarios
para rastrear al verbo insaciable
de las querencias
a la fecunda visión
proletaria de las voluntades
que trascienden lo ancestral
de remotos mares, puertos,
realidades e imaginerías.
Kalewche Barcoiche
resplandece no sólo en la noche
y con neblina
el mago prodigio
de su metamorfosis
que nos insurrecciona
con palabras
desde el continente del énfasis
por osadas utopías
ahogando abismos
entre revueltas y tradiciones
pujantes de horizonte.
Y a contraviento
de los sinsentidos,
del absurdo y los destierros
nos seduce como tripulantes
con los papiros
de su andadura
como el barco nórdico
de uñas
que inmortaliza
una piedra rúnica.
Así honrando revoluciones
y beldades
mientras se navega
a perpetuidad
con la brújula roja
predilecta de los bucaneros
que asaltan las costas
del más acá
y más allá.