• A Luna Bahía, Alfonso, Jazmín, Carmelita, Ulises y Severina.
En el girasolear
de los cariños
la vida sorprende
abrazando el aquí
con la gratitud
del ahora
que es al final
principio
del antes
aún naciente
en el alfabeto
del siempre
después
porque todo
es y fue
lo que será
un juego
ante la dicha
de encontrar
sintonías
que sacan
y ponen
sombreros
para celebrar
lo erudito
de cada emoción.