A Sofia Barrionuevo
En la precisa y preciosa
conjunción que el baile
encuentra con el latido
de lo sentimental
Ella abre los pétalos
que reúnen pájaros
pañuelos despiertos
cartas que llegan
directo al corazón
y les deja
con el suspiro
en un encuentro
como faro
mientras danza
tal navío del deseo
dibujando el encanto
que siempre
la ha perfumado
desde el pulso
de una rosa roja
en lo descalzo
de su geografía
abierta al don
libre y certero
de bailar.